...Como la manzana dulce se vuelve roja en la rama,
alta sobre la más alta y olvidada de los cosechadores
-pero no la han dejado por olvido: es que no la pudieron alcanzar-...
Safo de Mitilene.
Como la manzana de Safo
colgado de la rama melancólica
pende de un hilo mi sueño.
Salto y me revuelvo,
en busca de un experto en
subir escaleras.
No puedo conseguirte y
sin embargo
te ríes de mí
como un pecado
tan original como la vida.
Soez como el viento,
vital como el suspiro.
Un mordisco y
todo perdido.
Un pájaro llegó a su corazón
y puso su nido
dejando un ático
de desesperanza.
Me callo y no vuelvo
para decir adiós
a la manzana.
Si no puedo olvidarlo,
tendré que hacerlo.
¿Qué?
Locura
¿Para?
Sobrevivir.
Hay que matar a la manzana
aunque yo muera con ella.